EL CUIDADO DE LA SALUD DENTAL EN LOS MÁS PEQUEÑOS: ODONTOPEDIATRÍA

La odontopediatría es la rama de la odontología especializada en el cuidado de la salud bucodental de bebés, niños y adolescentes. Su objetivo es acompañar el desarrollo de la dentición desde los primeros meses de vida, prevenir problemas futuros y fomentar hábitos saludables que se mantendrán durante toda la vida adulta.

Los odontopediatras no solo se especializan en los tratamientos propios de la infancia hasta la adolescencia, sino también en ofrecer una atención adaptada al carácter y las necesidades emocionales de los más pequeños, convirtiendo la visita al dentista en una experiencia positiva y educativa, fomentando hábitos saludables desde una edad temprana.

El objetivo principal es prevenir problemas futuros y garantizar que los dientes de los niños crezcan fuertes y sanos.

Importancia del cuidado dental en la infancia

La salud dental infantil es fundamental, ya que los dientes de leche cumplen funciones esenciales más allá de permitir que el niño mastique o sonría. Estos dientes temporales actúan como guías para la salida de los dientes permanentes, favorecen el correcto desarrollo del habla y ayudan a que los huesos y músculos maxilofaciales crezcan adecuadamente. Cuidarlos es esencial para evitar infecciones, dolor, problemas estéticos o incluso dificultades en la alimentación.

Además, la infancia es la etapa perfecta para asentar hábitos de higiene bucodental. Los niños que aprenden desde pequeños a cuidar su boca suelen mantener estos hábitos a lo largo de su vida, lo que reduce significativamente la aparición de caries, enfermedades gingivales y otros problemas dentales en la edad adulta.

Consejos para mantener una buena salud dental en los niños

El cuidado dental debe comenzar incluso antes de la salida del primer diente. A lo largo del crecimiento, se pueden seguir diferentes recomendaciones:

  • 1. Higiene desde bebés: Tras cada toma, es recomendable limpiar las encías del bebé con una gasa húmeda. Cuando aparece el primer diente, se debe comenzar a usar un cepillo infantil suave y una cantidad mínima de pasta dental con flúor.
  • 2. Cepillado diario: A partir de los 3 años, los niños pueden empezar a cepillarse solos, siempre bajo supervisión hasta los 7 años como mínimo. Se recomienda realizar un cepillado mínimo de dos veces al día (mañana y noche), especialmente antes de dormir.
  • 3. Uso adecuado del flúor: El flúor es un aliado indispensable para prevenir la caries. La cantidad de pasta debe adaptarse a la edad del niño: un “granito de arroz” hasta los 3 años y un “guisante” a partir de esa edad.
  • 4. Uso del hilo dental: Generalmente a partir de los 2 o 3 años, una vez que los dientes estén suficientemente juntos.
  • 5. Evitar hábitos perjudiciales: El uso prolongado del chupete, chuparse el dedo o beber biberón con líquidos azucarados por la noche puede generar maloclusiones, caries y otros problemas dentales.
  • 6. Fomentar el ejemplo en casa: Los niños aprenden imitando, por ello ver a los adultos cepillarse los dientes a diario y de forma correcta, facilita que ellos quieran hacerlo también.

Visitas al dentista: cuándo y por qué son necesarias

Las visitas al dentista en Don Benito forman parte el cuidado dental infantil. La primera visita al odontopediatra debe realizarse alrededor del primer año de vida o, como máximo, cuando comienza a salir el primer diente. Aunque pueda parecer pronto, esta revisión inicial permite detectar alteraciones tempranas, evaluar la erupción de los dientes y orientar a los padres en los cuidados adecuados.

A partir de ese momento, se recomienda acudir al dentista cada seis meses, el cual realizará un examen completo, limpiará los dientes y brindará una serie de consejos sobre el cuidado dental.

Las revisiones periódicas ayudan a prevenir, detectar y tratar problemas de forma temprana, reduciendo la necesidad de tratamientos invasivos. Además, la familiaridad con el entorno dental evita que el niño desarrolle miedos o ansiedad en el futuro.

Problemas dentales más habituales en niños

Los niños pueden desarrollar diversos problemas dentales, muchos de ellos relacionados con hábitos o alimentación:

  • Caries infantil temprana: La caries es la enfermedad más habitual en bebés que consumen biberones con leche, zumos o bebidas azucaradas antes de dormir. Puede provocar dolor y complicaciones si no son tratadas.
  • Maloclusiones: Problemas en la alineación de los dientes provocadas por hábitos como el chupete, la succión del pulgar o la respiración oral. En ocasiones puede requerir tratamiento ortodóntico.
  • Traumatismos dentales: Muy frecuentes durante los primeros años de juego.
  • Gingivitis infantil: Inflamación de las encías causada por una higiene bucal deficiente e inadecuada.
  • Dientes retenidos o erupción tardía: Que deben ser vigilados para evitar problemas de alineación y desarrollo de los dientes permanentes.

La detección temprana de estos problemas permite actuar a tiempo y evitar complicaciones futuras.

Alimentación y su impacto en la salud bucal

La alimentación tiene un papel clave en la salud dental de los niños:

  • El consumo excesivo de azúcares como: refrescos, bollería, zumos envasados, caramelos o chucherías, incrementa considerablemente el riesgo de caries.
  • Es recomendable priorizar alimentos naturales como frutas, verduras que además de ayudar a limpiar los dientes de forma natural son ricas en vitaminas y minerales.
  • Introducir lácteos (yogur y queso), pescado y alimentos ricos en calcio.
  • Los alimentos duros como manzanas o zanahorias crudas estimulan la producción de saliva y ayudan a limpiar los dientes de manera natural.
  • Asimismo, es importante enseñar a los niños a beber agua como bebida principal, evitando refrescos y bebidas azucaradas.

Llevar una alimentación equilibrada además de se beneficioso para la salud dental, también lo es para la salud general del niño.

Cómo ayudar a los niños a perder el miedo al dentista

El miedo al dentista es común, pero se puede evitar o minimizar con algunas estrategias:

  • Realizar visitas previas sin tratamientos para que el niño se familiarice con el entorno y personal.
  • Evitar usar el dentista como amenaza, ya que genera ansiedad innecesaria.
  • Explicar la visita de forma positiva, con lenguaje sencillo y sin mencionar dolor.
  • Elegir un odontopediatra, profesional formado para tratar a niños con paciencia y empatía.
  • Reforzar positivamente, felicitando al niño tras la visita.

Es importante cuidar la salud oral de los más pequeños de la casa para de este modo asegurar un correcto crecimiento.

INFORMACIÓN Y PRESUPUESTO ON-LINE